Silencios y petardos en Madrid

Domingo 6 de Mayo 2012 Necesitamos urgentemente que la querida empresa de Madrid coja al toro por los cuernos y con una actitud contundente y severa, empiece a tomar nota urgentemente para elaborar una lista negra. Apuntando a todo aquel diestro que no tenga las actitudes necesarias para presentarse en el coso venteño, con el fin de homenajearle con unas largas vacaciones indefinidas. Con semejantes reformas taurómacas daríamos paso a nuevas oportunidades a posibles jóvenes promesas. El primero en ser incluido en dicha lista sería Salvador Vega por sus deficiencias lidiadoras y valor a cuentagotas. No es casualidad el caso Salvador cuando ya se le fue un toro de la ganadería de San Martin y para colmo empresarial nos lo vuelven a colar. Con su primero un animal noblote manso que apenas se le pico y toreable por el derecho, basó su faena en la descolocación y el toreo al relance. Con su segundo un animal noble pero con casta paso las de Caín desde el primer momento, ganando el animal en todos los terrenos y en todas las acometidas. Miedo en los aceros dando un recital de pinchazos. El segundo en la lista iría Oliva Soto un diestro mediocre tirando mediocre-peleon no pasando de tercera regional. Con su primero un bicho serio largo y con ganas de pelea estuvo a la reiva como barco sin veleta, pasando más miedo que pasajeros del Titanic. Calvario con los aceros. Con su segundo bicho, un animal noble flojo y que aun así derribo al caballo, toreo a lo eléctrico dando latigazos en vez de pases, abusando del destoreo y toreo de mano derecha. Lo despacha de un pinchazo y una media caída. Eduardo Gallo puede salvarse de la quema, aunque su toreo es pobre, monótono y en algunos casos ventajista. Con su primero un animal descastado y flojo abuso de muleta arriba lo despacha con dos pinchazos. Con su segundo un animal manso y rajado estuvo con decisión y aunque fue al final de la faena abusando del toreo encimista. Un pinchazo y una entera. Corrida toreablea aunque escasa de emoción siendo aprovechado dos animales 3 y 4 siendo aplaudidos en el arrastre. Mal en el caballo tomadon 6 de verdad por un tumbo.

Al final de la corrida se despido a los toreros citados para posibles listas negras con dos tenebrosos silcencios.